Mediante un trabajo de investigación en el oeste de Caracas, la Policía Metropolitana detuvo a dos empleados de Mercal que desviaban mercancías de inventario, y las revendían a través de una red de buhoneros.
El director de esa institución, comisario Wilmer Flores, indicó que Pedro y José Contreras, de 48 y 24 años de edad, respectivamente, además de otros individuos que aún no han sido identificados, solicitaban una cantidad de alimentos que excedía la capacidad de los locales que operan en Catia.
La diferencia aparentemente no era incorporada a los registros del local, y luego era entregada a los vendedores informales que trabajan en el bulevar del sector.
Los detenidos formarían parte de un grupo liderado por El Paisa de Gramovén. Cuando se efectuó el procedimiento, estaban disponiendo de 22 cajas de pollo entero, 33 cajas de carne de segunda, 10 cajas de mantequilla, 7 bolsas de carne y 8 paquetes de galletas.
Según Flores, estos sujetos obtenían la mercancía a precios de mayor, y luego la revendían con sobreprecio.
Los Contreras fueron procesados en flagrancia, sobre la base de un decreto presidencial que prohíbe la venta de productos de la corporación Casa en locales distintos a los de Mercal.
EL NACIONAL - Miércoles 11 de Junio de 2008
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