(03.07.08) Las terrazas KK y J de Nueva Tacagua, en Catia,se encuentran en un estado deplorable y de deterioro considerable producto de los continuos deslizamientos de tierra. En esas dos comunidades todavía rondan aproximadamente 120 familias, las cuales esperan la materialización de la oferta de reubicación del Gobierno nacional.
Entre tanto, dicen vivir la agonía que produce estar en una zona de desastre, no sólo porque las grietas y los hundimientos se aceleran con cada palo de agua, sino porque además ahora los domina "el abandono y la desidia gubernamental".
Denunciaron que el agua potable les está llegando cada 15 días, que las pocas unidades del transporte público pasan cada dos horas, que las escuelas están a medio funcionar y que la seguridad ciudadana "hace tiempo que dejó el pelero". Ello sin contar la amenaza latente de los virus sobrevolando el lugar, dada la gran cantidad de vertederos de basura incontrolados.
"Si se nos presenta una emergencia aquí hacemos magia. La verdad es que estamos abandonados y lo último que nos está pasando es que quieren cerrar la escuela Julio Planchart. Eso nos complicaría enviar a nuestros hijos y nietos a otros colegios, pues el transporte es escaso", comentó Balbina Cristancho. Los habitantes declararon que los cambios de los ministros de Vivienda y Hábitat les ha retrasado la reubicación.
Extraído de Última Noticia. Jueves 3 de julio de 2008.
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