A un año del "cierre técnico" de la Maternidad Castillo Plaza (estado Zulia), más de cien madres que reciben control prenatal en el centro perdieron las esperanzas de parir dentro de sus pabellones recién remodelados en vista de las recientes informaciones suministradas por la directiva del Hospital Universitario de Maracaibo (HUM) a los médicos del materno en las que se señalan que las remodelaciones se extenderán de manera indefinida.
Édgar Coello, médico residente de la especialidad gineco-obstetricia, indicó que alrededor de 60 por ciento de pacientes que presentan embarazos de alto riesgo están "a la buena de Dios", puesto que no tienen idea de dónde darán a luz y bajo cuáles condiciones. "Ya sabemos que la Maternidad no la abrirán pronto. Ahora nos preguntamos qué pasará con la gran cantidad de pacientes que parirán en los próximos meses, de las que la mayoría son adolescentes primerizas con embarazos de alto riesgo. Se van a seguir muriendo tanto las madres como los niños en el peloteo".
Coello relacionó el cierre del centro de salud con las 70 muertes maternas registradas el año pasado en la región, además de las 15 contadas en lo que va de año. Alertó que la cifra seguirá en aumento mientras se mantengan inhabilitados estos espacios. Explicó que para referir a las parturientas debe realizarse un protocolo que podría demorar hasta una hora para conseguir que las reciban en otro hospital que cuente con una cama para atenderlas, condición muy poco común debido al colapso de los centros de salud de la región.
(La Verdad (Zulia), Edición Digital, 26/05 - Karelis García, versión Agencia Pana de Cecodap)
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