“¡Abran la maternidad!”, demandaron los protestantes. A estas alturas del cierre —casi un año— lo único que quieren saber es una fecha de reapertura. Histerectomías también están paralizadas.
Que el principal centro gineco-obstetra del Zulia tenga sus puertas cerradas, desde hace casi un año, deja amargas huellas en la salud de la región: 15 muertes maternas, aseguran los médicos de la maternidad Armando Castillo Plaza, se han registrado como consecuencia del cierre más largo que ha vivido el hospital, desde su fundación, en 1964.
La voz de protesta volvió a sentirse, ayer, cuando médicos y pacientes se unieron en un sólo clamor: “¡Abran la maternidad, abran la maternidad!”, expresaron ondeando una bandera que decpia: “Protestamos por el derecho que tienen las madres a recibir una atención digna”.
Primero, eran 15 días, luego un mes y ahora no hay fecha definida para la reapertura del centro que está dejando de atender, en este momento, unas 60 pacientes a diario.
Henry Ocando, residente de segundo año del postgrado de ginecología, asegura que el descontento es generalizado y, a estas alturas del cierre, lo único que quieren saber es una fecha de reapertura.
“Nadie se ha reunido con nosotros, no nos han dado fecha, ni respuesta, a pesar de nuestras protestas”, expuso Ocando.
Aclaró que el reclamo “no tiene ningún tinte político, nuestro único motivo son las pacientes”.
Los médicos y demás personal de la institución dijeron que son amedrentados para que no declaren lo que allí sucede.
“Es bueno que todo salga a la luz pública, pero yo no puedo hablar porque soy suplente y, si declaro, seguro no me dejan fija”, expuso una obrera.
Además, la protesta, que tenía carácter pacífico, se vio empañada por la presencia de una persona que, según los médicos, aparece cada vez que hay una manifestación y, en esta oportunidad, trató de agredir a una médica residente del cuarto año de gineco obstetricia.
“Este personaje siempre se aparece a amedrentar a la gente. Se ha dicho que es familia de alguien de la directiva y que tiene trastornos mentales, pero denunciamos que es un peligro para todo el personal médico de esta institución”, expuso Nerio Ulloa, representante del Sindicato Sectorial de Salud.
Las reparaciones en la maternidad comenzaron el 28 de mayo del año pasado y, según los protestantes, no existe la mínima esperanza de que la reapertura se dé antes de que el cierre cumpla aniversario.
Desde entonces, se han dejado de atender a más de 23 mil parturientas, quienes han tenido que ser remitidas a otras instituciones, incrementando el grave problema del peloteo.
La semana pasada las autoridades del hospital expusieron que el retardo en reabrir el centro asistencial se debió a que el proveedor de parte del mobiliario se retrasó.
Con cinco meses de embarazo Massiel Montiel, de 19 años, no sabe dónde dará a luz: “Yo soy de San Jacinto y quiero parir aquí, pero dijeron que me enviarán al Cuatricentenario y yo no quiero. Me han hecho comentarios muy negativos sobre ese centro asistencial”.
El cierre de la maternidad también afecta a Elsi Oñates, de 61 años, de otro modo. Sin poder contener el llanto, la mujer expresó: “Tengo un año y medio esperando por una histerectomía y ésto puede convertirse en un cáncer”.
Para la situación no hay respuestas. La dirección del HUM no dio declaraciones y fuentes allegadas al director del hospital aseguraron que no está interesado en dar declaraciones al respecto por considerar que sólo son manifestaciones políticas.
Extraido de Panorama. 09.05.08
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